Una herramienta no es ni buena ni mala, sino adecuada o inadecuada para un fin. Para aquellos que cuestionan la utilidad de las áreas de defensa en el monte, también llamadas cortafuegos, basta echar un vistazo a la siguiente imagen:

Las áreas de defensa son una herramienta más entre las diversas que se pueden manejar en la defensa contra incendios forestales. No es la única, pero su eficacia está sobradamente contrastada en áreas donde la gran continuidad forestal demanda crear esas discontinuidades. Son zonas de trabajo y referencia para los bomberos forestales que permiten una planificación rápida desde el primer momento.
Utilizando el símil médico que @Mario_72 ha utilizado en Twitter, decir que las áreas de defensa no sirven porque hay fuegos que las superan, sería como decir que la atención primaria es inútil porque hay enfermedades que requieren de UCI.
En la selvicultura, en el monte y en los incendios todo suma.